PUNTOS DESTACADOS
1. La etiqueta de edición limitada de Luxoro está inspirada en su fundador y realza sus dos pasiones: el amor por las montañas y la navegación
2. Esta etiqueta multicapa incluye distintos efectos, como un estampado con efecto de madera y un efecto 3D de Spatial FX
Vladimir Kokrhanek nació en Moravia (Brno), en el corazón de la República Checa. Junto a su pareja, emprendió un largo peregrinaje que les llevó a distintas partes del mundo. La primera parada del viaje fue Bruselas. Después, partieron hacia Argentina y, finalmente, se asentaron en Vigevano, donde Kokrhanek fundó Luxoro en 1968 y la transformó en la empresa que es actualmente. Este año, Luxoro, productor global de láminas y placas, celebra su 50.º aniversario.
Una etiqueta inspirada en las pasiones del fundador
La etiqueta Wind loved de Luxoro está inspirada en la naturaleza. Se escogieron las dos grandes pasiones de su fundador, las montañas y la navegación, para describir la figura y el espíritu de Vladimir Kokrhanek. El viento, un espíritu que conecta ambos elementos, aparece representado en forma de vela desplegada que se abre entre las montañas.
La etiqueta ha sido diseñada por Mario Di Paolo, Director artístico de Spazio Di Paolo, y es una composición de varios niveles que muestra las cumbres de las montañas del valle de Aosta.
“Se trata de una etiqueta muy técnica”, comenta Jessica Liffredo, de Graphic Industry Eurostampa, responsable de la creación de las dos capas superpuestas: Velmart White WSA FSC y Raflamatt 90 WSA FSC.
Cada capa de papel cuenta con diferentes efectos. La textura con efecto de madera creada por las herramientas de estampación de Hinderer y Muehlich (H+M) da calidez al paisaje que rodea la botella, tal y como hacen los árboles que rodean las montañas. En la última capa exterior que aparece en primer plano, nuestra vela presenta un efecto tridimensional debido a la solución óptica Spatial FX®, recreada con la exclusiva tecnología Trustseal®. La vela es una sencilla imagen plana que da la impresión de mecerse al viento gracias a un efecto 3D que transmite sensaciones inmediatas tanto a la vista como al tacto.
El vino es un chardonnay de la bodega italiana Les Crêtes y fue elegido por Jana Kokhnarek, una apasionada amante del vino.